Introducción
Las stablecoins conectan el mundo fiat con el ecosistema cripto. Son monedas digitales cuyo valor está vinculado a divisas como el dólar estadounidense o el euro.
Para los traders activos resultan útiles porque les permiten escapar de la volatilidad del mercado cripto. Cuando prevén una caída, pueden vender sus criptomonedas y mantener su capital en stablecoins más estables a corto plazo.
El nombre “stablecoin” puede ser algo engañoso. Sugiere que su valor es completamente estable, cuando en realidad ninguna moneda lo es. A largo plazo, tanto el euro como el dólar pierden poder adquisitivo. Si bien son más estables que Bitcoin en el día a día, hasta ahora Bitcoin ha demostrado ser un mejor refugio de valor a largo plazo. Por eso, las stablecoins sirven como herramienta táctica para traders, pero no se recomiendan como ahorro a largo plazo.
¿Cuál es el valor añadido de las stablecoins?
Si ya existen el euro y el dólar, ¿para qué necesitamos stablecoins? La clave está en su utilidad dentro del ecosistema cripto. Al principio les costó ganar tracción por falta de transparencia, altas comisiones y tiempos de espera largos. Hoy la situación es distinta: la capitalización total del mercado ronda los 180.000 millones de dólares.
La adopción se debe principalmente a su uso en transacciones, búsqueda de estabilidad y aplicaciones en DeFi (Decentralized Finance).
Nuevos productos financieros
Las stablecoins ofrecen acceso a una nueva generación de productos financieros antes reservados a bancos tradicionales, especialmente dentro del ecosistema DeFi. En países con poco acceso a servicios financieros, las stablecoins pueden ser una alternativa para abrir una cuenta, pedir préstamos o concederlos.
También permiten ahorrar con rentabilidades atractivas. En Occidente no es tan relevante por la relativa estabilidad de nuestras monedas, pero en países con inflación alta como Zimbabue, Turquía o Argentina, las stablecoins pueden ser una solución. Incluso para occidentales pueden resultar interesantes gracias a los rendimientos que ofrecen en algunas plataformas, a veces de hasta el 20% anual.
Préstamos en stablecoins con cripto como colateral
Otra aplicación es pedir préstamos en stablecoins sin necesidad de vender Bitcoin u otras criptomonedas. Basta con aportar tus cripto como garantía, igual que una casa en una hipoteca. El interés depende de la demanda: cuanto mayor sea, más sube la tasa.
Si el valor de tu Bitcoin colateral cae demasiado, deberás aportar más para evitar la liquidación. Hay que tener cuidado, ya que el uso de apalancamiento en cripto puede conllevar grandes pérdidas.
Tipos de stablecoins
No todas las stablecoins son iguales. Aunque muchas siguen el valor del dólar, no siempre están respaldadas directamente por dólares. Los principales modelos son cuatro: fiat-colateralizadas, cripto-colateralizadas, respaldadas por materias primas y algorítmicas.
Stablecoins respaldadas por fiat
Las más populares son las respaldadas por monedas fiat, como dólares depositados en reserva en bancos o custodios. El valor se mantiene con una relación 1:1. Ejemplos: Tether (USDT), Gemini Dollar (GUSD), True USD (TUSD) y Paxos Standard (PAX).
Stablecoins respaldadas por cripto
Funcionan con smart contracts. Para emitir DAI, por ejemplo, debes enviar cripto como garantía a un contrato. Normalmente, la garantía es mayor que el valor emitido (p. ej. aportar $200 en cripto para recibir $100 en DAI). Recuperas tu colateral cuando devuelves la deuda.
Stablecoins respaldadas por materias primas
Representan activos físicos como oro, plata u petróleo. Entre los ejemplos más conocidos están Tether Gold (XAUT) y Paxos Gold (PAXG), ambos vinculados al oro.
Stablecoins algorítmicas
No están respaldadas directamente por fiat, sino que utilizan smart contracts para regular la oferta. Si el precio sube, se reduce la circulación, y si baja, se emiten más monedas. En muchos casos se apoyan en reservas de Bitcoin u otros activos. Terra y su token LUNA fueron un ejemplo popular.
Esta ha sido tu introducción al mundo de las stablecoins. Aunque puedan parecer menos atractivas que Bitcoin u otras criptos, desempeñan un papel clave como puente hacia el sistema financiero tradicional. Todo indica que el futuro de las stablecoins será cada vez más relevante.